viernes, 11 de marzo de 2011
Joder, necesito mi sonrisa.
Otra vez ando perdida. Me reparo a mirar por donde piso, mis pies dejaron de ser mis cómplices para seguir su propio ritmo dejando de lado mi música interior. Vivo sin ganas, aprovecho más las horas de sueño que las que mantengo despierta, francamente no sé si amanece muy temprano, o es que nunca anochece. Camino con sigilo, pasando lo máximo posible desapercibida, y bien sé que yo no soy así. No sé a qué se debe este estado de ánimo, quizás me haga falta algo por lo que sentir, porque me encuentro realmente sin esa luz que hace brillar mi sonrisa. Tengo miedo de no volver a ser yo, de no encontrarme en ninguna mirada. De permanecer indiferente al resto del mundo y a mí misma. Tengo tanto sueño acumulado en las pestañas que ahora me cuesta volver a la realidad
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario